Los que habeis seguido mi blog sabreis que el primer dia me di cuenta que la bolsa donde tenia mi credencial se me habia quedado en casa,pero no fue solo la credencial lo que se me habia quedado alli.La piedra para Marta estaba en la misma bolsa por que llevaba la idea de llevarlas juntas ya que la credencial es imprescindible llevarla siempre encima.
Cuando llegue a Astorga y me dispuse a sacar la credencial para sellarla y echarme a andar me di cuenta de que la bolsa donde la tenia se me habia quedado en casa y se me vino el mundo a los pies,pense en recoger alguna piedra por el camino,en no hacer nada,escribir algo en algun lado....no se,pense que si recogia una piedra por el camino igual era de otra persona,nunca me gusto eso de que escriban en los lugares publicos y no hacer nada me remordia todo por dentro.
Asi pase los dias,pensando que podia hacer y al final no hubo dia que no me acordase de Marta.
Llegue a Santiago,lo primero que hice fue ir a lavar la bici antes de adentrarme hacia la Plaza del Obradoiro,baje hacia la catedral por donde tantas decenas de veces hago al año por vivir cerca,pero esta vez era diferente estaba llendo de bicigrino y ademas sentia que habia hecho algo muy grande.
Pase por el aparcamiento de coches Juan XXIII donde tantas veces habia aparcado mi coche,enfile la calle Rua San Francisco,que es por donde siempre me gusto entrar hacia la Plaza do Obradoiro y me deje llevar,parecia que la bici sabia el camino y apenas tuve que dar un par de pedaladas,me adentre en la inmensidad de la plaza siempre mirando al suelo y me fui hacia los soportales que hay delante de la catedral.
Al llegar a ellos,pose con suavidad la bici en el suelo,me quite el casco y los guantes,que tambien pose en el suelo y todo de espaldas a la catedral.Cerre los ojos y me sente en el suelo apoyandome en una de las columnas,fue increible levantar la cabeza y ver la catedral,coger un aliento de oxigeno que me recorrio todo el cuerpo y pensar en nada por unos instantes.
Me senti aliviado y empezo a pasar por mi mente todo lo ocurrido estos dias,fue algo increible.Estuve asi embobado como cinco minutos,pero fueron cinco minutos de los mejores momentos de mi vida,aun no podia creerme que habia podido superar todo lo que me habia pasado esos dias.
Sin embargo tenia algo pendiente,era Marta y no podia dejarlo pasar.
Una vez en casa fui a ver en donde se me habia quedado la bolsa con la credencial y la piedra de Marta y no la encontre,pense entoces que la habria perdido por el camino hacia Astorga y que tendria que hacer otra cosa,toda la tarde pensando donde habria ido a parar aquella bolsa.
Por la noche empece a vaciar las alforjas de ropa sucia y todo lo demas y al fondo muy al fondo,es una esquinita aparecio aquella bolsa que no me dejaba la mente tranquila,era increible habia venido todo el camino conmigo y no habia logrado encontrarla,no me lo podia creer.
Al dia siguiente por la tarde tuve una idea,me acerque al camino ingles,que pasa cerca de mi casa,encontre un sitio que me encanto y no lo pense dos veces,alli deje mi piedra para Marta,asi tambien podre pasarme de vez en cuando a mirarla y pensar en todas las peripecias que pase en este mi primer camino y saber que ella estuvo conmigo y me ayudo desde el principio hasta el final.
Ademas,ahora los que hagan el camino ingles tambien tendran con ellos a nuestro angel.
